El flan de café es una exquisita variación del clásico flan, que añade a la suavidad y cremosidad tradicional un toque intenso y aromático gracias al café. Este postre es perfecto para los amantes del café y para aquellos que buscan una alternativa sofisticada a la versión original. Con una textura sedosa y un sabor perfectamente equilibrado entre el dulzor de la leche condensada y la fuerza del café, este flan se convierte en una delicia para el paladar. Prepararlo es sencillo y el resultado es un postre elegante que impresiona en cualquier ocasión.

Ingredientes:

• 4 huevos
• 1 lata de leche condensada (400g)
• 1 lata de leche evaporada (400g)
• 1 taza de café fuerte preparado
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 1 taza de azúcar (para el caramelo)
• Agua

Instrucciones:

1. Preparar el Caramelo:

• En una olla a fuego medio, coloca el azúcar con 2-3 cucharadas de agua. Deja que el azúcar se disuelva lentamente y se caramelice, moviendo la olla con cuidado para que el caramelo se distribuya de manera uniforme. Cuando adquiera un color dorado intenso, retira la olla del fuego y vierte rápidamente el caramelo en el molde para flan, asegurándote de cubrir bien el fondo y los lados. Este paso le dará al flan su característico toque de dulzura tostada.

2. Preparar la Mezcla del Flan:

• En un bol grande, bate los huevos hasta que estén espumosos y bien integrados. Añade la leche condensada y la leche evaporada, batiendo constantemente hasta obtener una mezcla homogénea y sin grumos.
• Incorpora el café fuerte preparado y la esencia de vainilla, mezclando bien para que todos los ingredientes se integren y el sabor del café se distribuya uniformemente.

3. Cocinar al Baño María:

• Vierte la mezcla de flan sobre el molde caramelizado. Cubre el molde con papel aluminio para evitar que se dore demasiado durante la cocción.
• Coloca el molde dentro de una bandeja más grande y llena la bandeja con agua caliente hasta alcanzar la mitad de la altura del molde, creando un baño maría.
• Hornea a 180°C (350°F) durante aproximadamente 50-60 minutos. Sabes que el flan está listo cuando, al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.

4. Enfriar y Desmoldar:

• Una vez que el flan esté cocido, retíralo del horno y del baño maría. Deja que se enfríe a temperatura ambiente y luego refrigéralo por al menos 4 horas, o hasta que esté bien frío y firme.
• Para desmoldar, pasa un cuchillo por los bordes del molde para despegar el flan. Coloca un plato boca abajo sobre el molde y voltea con cuidado para liberar el flan y que caiga suavemente sobre el plato.

Consejo Extra:

Para darle un toque aún más especial a tu flan de café, puedes espolvorear un poco de café molido fino o cacao en polvo sobre la superficie antes de servirlo. Esto no solo intensificará el sabor del café, sino que también le dará una presentación más elegante. Además, si quieres un flan más suave y ligero, asegúrate de batir bien los huevos para incorporar aire, lo que le dará una textura más esponjosa.

Conclusión:

El flan de café es un postre que combina la tradición con un toque moderno, ideal para cualquier ocasión en la que quieras sorprender a tus invitados o darte un gusto especial. Su preparación es sencilla y el resultado es un flan cremoso con un sabor a café que encanta a los paladares más exigentes. Ya sea como cierre de una comida especial o como una delicia para disfrutar en cualquier momento, este flan se convertirá en un favorito en tu repertorio de postres. ¡Disfruta de cada cucharada de esta dulce tentación!