¡Harina, azúcar y manteca es todo lo que necesitas! Esta receta la puede hacer un niño, guárdala

En el universo de la pastelería, a menudo se dice que la magia reside en la simplicidad, y la receta que te presento hoy es un claro ejemplo de esta filosofía. Con solo tres ingredientes básicos: harina, azúcar y manteca, podrás crear unas galletas deliciosas que, a pesar de su sencillez, te sorprenderán por su sabor y textura. Esta es una receta tan fácil que incluso un niño podría hacerla, por lo que es perfecta para introducir a los más pequeños en el arte de la cocina. Así que, ¡guárdala y disfrútala cada vez que quieras algo dulce y rápido!

Ingredientes:

  • 1/4 taza de azúcar
  • 1 taza de harina refinada
  • 85 gramos de manteca

Procedimiento:

1. Preparación Inicial:

  • Comienza precalentando tu horno a 250 grados Celsius. Este paso es crucial para asegurarte de que las galletas se cocinen de manera uniforme.

2. Mezcla de la Manteca:

  • Coloca la manteca en el recipiente de un procesador de alimentos y mézclala durante 2 a 3 minutos, o hasta que adquiera una textura suave y cremosa. Esto es clave para lograr una masa homogénea y fácil de trabajar.

3. Incorporación del Azúcar:

  • Añade el azúcar a la manteca y bate hasta que ambos ingredientes se integren por completo, formando una mezcla homogénea.

4. Adición de la Harina:

  • Incorpora la harina a la mezcla de manteca y azúcar. Trabaja todos los ingredientes juntos hasta obtener una masa perfectamente combinada y manejable.

5. Formado de la Masa:

  • Con las manos secas, reúne la masa y dale forma, enrollándola hasta que se convierta en un bollo uniforme. Este paso es esencial para asegurar que las galletas mantengan su forma durante la cocción.

6. Reposo de la Masa:

  • Envuelve la masa en film transparente y refrigérala durante al menos 20 a 30 minutos. Esto permitirá que la masa se asiente y sea más fácil de manipular.

7. Formado de las Galletas:

  • Luego, con los dedos, toma pequeños trozos de masa y forma discos aplanados de aproximadamente 1 cm de altura. Colócalos en una bandeja para hornear cubierta con papel de aluminio, dejando espacio entre ellos para que puedan expandirse al hornearse.

8. Horneado:

  • Lleva las galletas al horno precalentado a 220°C y hornea durante 8-10 minutos, o hasta que estén completamente cocidas y adquieran un hermoso tono dorado en la superficie.

9. Enfriado:

  • Tras retirarlas del horno, transfiere las galletas a una rejilla para que se enfríen por completo antes de servir.

Consejo Extra:

Para dar un toque especial a tus galletas, puedes decorarlas con chocolate derretido o con pasta de azúcar una vez que estén frías. Además, asegúrate de almacenarlas en un recipiente hermético para mantener su frescura durante más tiempo. Estas galletas son ideales para disfrutar a cualquier hora del día, pero si quieres hacerlas aún más especiales, sírvelas con una bola de helado y fruta fresca, creando un postre rápido y delicioso que encantará a todos.

Conclusión:

La simplicidad de esta receta de galletas con harina, azúcar y manteca demuestra que no se necesita mucho para crear algo realmente delicioso. Son perfectas para cualquier ocasión, ya sea una merienda con amigos o un postre rápido después de la cena. Su textura suave y su sabor delicado harán que estas galletas se conviertan en un básico en tu cocina. ¡Que lo disfrutes!

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