El budín de pan es un postre clásico, conocido por su sencillez, sabor reconfortante y la maravillosa idea de aprovechar el pan duro. Este postre no solo es delicioso, sino también un homenaje a la cocina de aprovechamiento. Su textura tierna y su combinación de sabores lo convierten en el acompañante perfecto para un café por la tarde o como cierre de una comida familiar. Este budín es una receta que une generaciones y se adapta fácilmente a diferentes gustos y ocasiones.
1. Preparar los Ingredientes:
Comienza precalentando tu horno a 180°C. Engrasa un molde para horno con mantequilla o aceite y espolvorea ligeramente con harina si lo prefieres, para facilitar el desmoldado.
2. Hidratar el Pan:
Corta el pan duro en trozos pequeños y colócalos en un bol grande. Vierte la leche sobre el pan y deja reposar durante unos minutos, permitiendo que el pan absorba la leche y se ablande completamente. Con un tenedor o tus manos, desmenuza el pan hasta formar una mezcla homogénea y suave.
3. Preparar la Base del Budín:
En el bol del pan hidratado, añade los huevos ligeramente batidos, el azúcar y la mantequilla derretida. Mezcla bien hasta integrar todos los ingredientes. Este es el momento perfecto para incorporar los complementos: agrega las pasas, la ralladura de naranja y una pizca generosa de canela. Revuelve todo con suavidad para que los sabores se distribuyan uniformemente.
4. Verter y Hornear:
Vierte la mezcla en el molde previamente preparado, alisando la superficie con una espátula. Lleva al horno precalentado y hornea durante 45-50 minutos. Sabrás que el budín está listo cuando la superficie esté dorada y, al insertar un cuchillo en el centro, este salga limpio.
5. Enfriar y Servir:
Retira el molde del horno y deja enfriar a temperatura ambiente durante unos 15 minutos antes de desmoldar. Esto ayuda a que el budín mantenga su forma. Una vez desmoldado, deja enfriar completamente sobre una rejilla. Sirve el budín a temperatura ambiente o ligeramente tibio.
Textura personalizada: Si prefieres un budín más suave, utiliza pan tipo brioche o pan de molde sin corteza.
Variaciones: Sustituye las pasas por trozos de chocolate, nueces o frutas confitadas para adaptarlo a tu gusto.
Decoración: Puedes espolvorear azúcar glas por encima antes de servir o acompañar con una salsa de caramelo o crema inglesa.
Almacenamiento: Este budín puede guardarse en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días. Si lo deseas, caliéntalo brevemente en el microondas antes de servir.
El budín de pan es una joya culinaria que combina tradición, simplicidad y sabor en un solo plato. Es perfecto para disfrutar en familia o compartir con amigos. ¿Quién puede resistirse al aroma de un budín recién horneado? ¡Prepara esta receta y lleva un toque de calidez y dulzura a tu hogar!