Si hay un postre que combina sofisticación, sabor intenso y una textura ultra cremosa, ese es el helado de pasas al ron. Esta receta es un verdadero clásico de la heladería gourmet, ideal para los amantes de los sabores profundos y bien equilibrados.
Las pasas, al macerarse en el ron, absorben todo su aroma y se transforman en pequeñas explosiones de dulzura que contrastan perfectamente con la suavidad de la base helada. Además, su preparación casera permite ajustar el nivel de alcohol, la dulzura y la cremosidad a tu gusto.
¿Lo mejor? No necesitas una máquina de helados para lograr un resultado profesional. Con solo unos pocos ingredientes y un poco de paciencia, podrás disfrutar de un helado de textura aterciopelada y sabor incomparable. ¡Prepara tu cuchara y comencemos!
Macerar las pasas
Coloca las pasas en un bol pequeño y viérteles el ron por encima. Deja reposar por al menos 1 hora o, si tienes tiempo, toda la noche para un sabor más intenso. Para intensificar el dulzor, puedes calentarlas a fuego bajo junto con el ron y el azúcar morena por 3-5 minutos, revolviendo constantemente. Luego, deja enfriar antes de usarlas.
Preparar la base del helado
En una cacerola mediana, calienta la leche y la crema a fuego medio hasta que empiecen a humear, pero sin llegar a hervir. Remueve ocasionalmente para evitar que se queme.
En un bol aparte, bate las yemas de huevo con el azúcar hasta obtener una mezcla espesa y de color claro. Luego, vierte lentamente la leche caliente sobre las yemas sin dejar de batir, evitando que el huevo se cocine bruscamente.
Regresa la mezcla a la cacerola y cocina a fuego bajo, revolviendo constantemente con una espátula o cuchara de madera. Cocina hasta que la crema espese lo suficiente como para cubrir el dorso de una cuchara sin que llegue a hervir. Retira del fuego, agrega la vainilla y la pizca de sal, y deja enfriar completamente.
Incorporar las pasas al ron
Una vez que la crema esté fría, agrégale las pasas maceradas junto con el ron restante. Mezcla suavemente para distribuirlas de manera uniforme.
Si tienes una máquina de helados, sigue sus instrucciones para batir la mezcla hasta obtener la consistencia deseada.
Sin máquina de helados:
Vierte la mezcla en un recipiente hermético y congela durante 4 horas. Cada 30 minutos, sácala y bátela con un tenedor o batidora de mano para romper los cristales de hielo. Repite este proceso 4 o 5 veces para lograr un helado más cremoso.
Servir y disfrutar
Cuando el helado esté bien firme (después de unas 6 horas en el congelador), retíralo y déjalo reposar unos minutos antes de servir. Sirve en copas o conos y decora con pasas adicionales y un chorrito de ron para un toque extra de sabor. También puedes acompañarlo con galletas de mantequilla o chocolate rallado.
Para un helado más ligero, sustituye la crema por leche evaporada o usa mitad crema y mitad yogur griego.
Si prefieres una versión sin alcohol, puedes remojar las pasas en jugo de naranja o té negro con especias.
Para un sabor más especiado, agrega una pizca de canela o nuez moscada a la base del helado.
Este postre es una combinación de cremosidad, dulzura y el toque justo de licor que lo hace simplemente irresistible. Ya sea para sorprender a tus invitados o para darte un gusto especial, este helado casero será una estrella en cualquier ocasión. ¡Anímate a prepararlo y cuéntanos cómo te quedó! 🍨✨