Si buscas un desayuno o merienda rápida, deliciosa y con ingredientes sencillos, este sándwich tostado de jamón, queso y huevo es la opción perfecta. Crujiente por fuera, con un relleno cremoso y derretido, esta receta es ideal para cuando quieres algo sabroso sin pasar mucho tiempo en la cocina. Con una combinación irresistible de sabores, se convertirá en tu nuevo favorito para cualquier momento del día.
Tostar el pan untando mantequilla en un lado de cada rebanada. Colocar en una sartén caliente y dorar solo un lado, asegurando una textura crujiente.
Preparar el relleno rompiendo un huevo en la sartén caliente. Dejar cocinar ligeramente antes de agregar el queso mozzarella y las tiras de jamón encima para que se derritan y combinen perfectamente.
Armar el sándwich untando mantequilla en el lado superior de la segunda rebanada de pan y colocándola sobre la mezcla de huevo, queso y jamón.
Cocción final volteando el sándwich con cuidado para dorar la otra cara y garantizar un acabado crujiente y dorado por ambos lados.
Añadir los toppings untando ketchup y mostaza al gusto para darle un toque extra de sabor.
Servir caliente y disfrutar de su textura crujiente y su relleno cremoso y fundido.
✅ Usa distintos quesos: Prueba con cheddar, gouda o suizo para un toque diferente.
✅ Añade más proteínas: Agrega más jamón, tocino o pavo para un sándwich más sustancioso.
✅ Incorpora vegetales: Unas rodajas de tomate o espinaca le darán frescura y equilibrio.
✅ Prueba con pan diferente: Usa pan integral, de centeno o con semillas para variar la textura y el sabor.
Este sándwich tostado de jamón, queso y huevo es la combinación perfecta de rapidez y sabor. Ideal para el desayuno, almuerzo o una cena ligera, se convertirá en un clásico en tu cocina. Si te encantan los sándwiches fáciles y deliciosos, explora más recetas y sorpréndete con nuevas combinaciones. ¡A disfrutar! 🥪🔥