Descripción

Los churros caseros son el tipo de postre que siempre te hará sentirte como si estuvieras en una fiesta o en una feria. Crujientes por fuera, tiernos por dentro y con el toque justo de dulzura, estos churros se pueden disfrutar solos o acompañados de tu salsa favorita, como chocolate caliente o dulce de leche. Hoy te traigo el secreto para hacerlos perfectos en casa, con ingredientes sencillos y fáciles de encontrar. ¡Con esta receta, podrás disfrutar de unos churros como los de la feria sin salir de tu cocina!

Ingredientes

• 1 taza (250 ml) de agua
• 2 cucharadas de mantequilla (30 g)
• 1 cucharada de azúcar
• 1 pizca de sal
• 1 taza (140 g) de harina de trigo
• 1 huevo grande (opcional, pero mejora la textura)
• 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional, pero aporta aroma)
• Aceite para freír (puede ser vegetal o de girasol)
• Para rebozar:
• ½ taza de azúcar
• 1 cucharadita de canela en polvo (opcional pero recomendado)
• Para acompañar:
• Chocolate caliente, dulce de leche o leche condensada

Modo de preparación

Preparar la masa: Comienza calentando el agua en una cacerola a fuego medio. Añade la mantequilla, el azúcar y la pizca de sal. Revuelve hasta que la mantequilla se derrita por completo y el azúcar se disuelva. Lleva la mezcla a ebullición.

Agregar la harina: Una vez que el agua con la mantequilla esté hirviendo, retira la cacerola del fuego y agrega la taza de harina de trigo de una sola vez. Mezcla vigorosamente con una cuchara de madera hasta que la masa se forme y se despegue de las paredes de la cacerola.

Incorporar el huevo: Deja que la masa se enfríe un poco (unos 5 minutos) para que el huevo no se cocine al agregarlo. Luego, añade el huevo a la masa y mezcla hasta que esté completamente incorporado. Si lo deseas, agrega la esencia de vainilla para darle un aroma delicioso a tus churros.

Freír los churros: Calienta suficiente aceite en una sartén grande o freidora a fuego medio-alto. Mientras el aceite se calienta, coloca la masa en una manga pastelera con una boquilla estrellada (la que tiene forma de estrella). Esto le dará a los churros su característica forma. Si no tienes manga pastelera, puedes usar una bolsa plástica con el extremo cortado.

Formar y freír: Una vez que el aceite esté caliente, forma los churros directamente en el aceite, cortando la masa con unas tijeras o presionando la manga para obtener la longitud que prefieras. Fría los churros durante unos 3-4 minutos o hasta que estén dorados y crujientes. Es importante no poner demasiados churros al mismo tiempo para evitar que se amontonen.

Rebozar los churros: Mientras los churros se fríen, mezcla el azúcar con la canela en un plato. Una vez que los churros estén listos, colócalos en el plato con la mezcla de azúcar y canela, y reboza bien cada uno para que queden bien cubiertos.

Servir: Sirve los churros calientes, acompañados de chocolate caliente, dulce de leche o leche condensada para sumergirlos. ¡Disfruta de estos deliciosos churros caseros!

Consejos y Conclusión

Si te gusta un toque extra crujiente, puedes dejar que los churros se frían por unos minutos más para obtener un dorado aún más intenso. Además, si quieres hacer churros rellenos, solo necesitas añadir un poco de dulce de leche o crema de chocolate al centro de la masa antes de freír.
Los churros caseros son el tipo de receta que nunca pasa de moda y siempre complace a todos. Con su exterior crujiente, su interior suave y el delicioso sabor a canela y azúcar, esta receta es perfecta para un desayuno especial, una merienda o un postre que todos disfrutarán. Así que la próxima vez que quieras consentir a tu familia o amigos, ¡no dudes en preparar estos irresistibles churros caseros!