Descripción

La tarta de espinacas es un plato clásico que combina lo mejor de los ingredientes frescos y nutritivos con la comodidad de una preparación sencilla. Este pastel salado es perfecto para cualquier comida del día, ya sea como plato principal acompañado de una ensalada o como parte de un buffet de brunch. Su versatilidad lo convierte en una excelente opción tanto para una cena ligera como para una ocasión especial. La combinación de espinacas frescas, queso y una base crujiente de masa hacen de esta tarta una delicia que conquistará a todos en la mesa.

Ingredientes

• 1 lámina de masa quebrada o de hojaldre
• 300 gramos de espinacas frescas
• 200 gramos de queso ricotta
• 100 gramos de queso parmesano rallado
• 3 huevos
• 1 cebolla mediana
• 2 dientes de ajo
• 100 ml de nata para cocinar
• 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• Sal y pimienta al gusto
• Nuez moscada al gusto

Modo de preparación

Preparar la base: Precalienta el horno a 180°C. Extiende la lámina de masa quebrada o de hojaldre en un molde para tarta, asegurándote de que cubra bien los bordes. Pincha la base con un tenedor para evitar que se formen burbujas durante la cocción. Hornea la masa durante 10 minutos o hasta que esté ligeramente dorada. Retira del horno y reserva.

Cocinar las espinacas: Lava bien las espinacas y escúrrelas. En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio y añade la cebolla picada y los ajos bien picados. Sofríe hasta que estén dorados y fragantes. Luego, añade las espinacas y cocina hasta que estén bien reducidas y toda el agua se haya evaporado. Esto asegurará que la tarta no quede aguada.

Preparar el relleno: En un bol grande, mezcla las espinacas cocidas con el queso ricotta, el queso parmesano, los huevos batidos y la nata. Añade sal, pimienta y una pizca de nuez moscada al gusto. Remueve bien hasta obtener una mezcla homogénea.

Montar la tarta: Vierte la mezcla de espinacas y queso sobre la base de masa precocida. Extiende de manera uniforme y alisa la superficie con una espátula. Si lo deseas, puedes espolvorear un poco más de queso parmesano por encima para un acabado dorado y crujiente.

Hornear: Coloca la tarta en el horno precalentado y hornea durante 25-30 minutos, o hasta que el relleno esté cuajado y la superficie dorada. Retira del horno y deja enfriar ligeramente antes de desmoldar y servir.

Consejos y Conclusión

Si deseas añadir más sabor y textura a tu tarta de espinacas, considera agregar algunos ingredientes adicionales al relleno. Puedes incluir trozos de jamón serrano o bacon crujiente para un toque salado, o nueces picadas para un contraste crujiente. Además, sustituir la ricotta por queso de cabra le dará un sabor más intenso y una textura cremosa extra.

La tarta de espinacas es una receta que destaca por su equilibrio entre sabor y nutrición. Es una opción ideal para quienes buscan una comida reconfortante y saludable a la vez. Además, su versatilidad te permite adaptarla a tus gustos personales o a los ingredientes que tengas en casa. Con esta receta, no solo disfrutarás de un plato delicioso, sino que también sorprenderás a tus comensales con una preparación que combina lo mejor de la cocina casera con un toque gourmet. ¡Atrévete a prepararla y disfruta de una tarta que, sin duda, se convertirá en una de tus favoritas!