Descripción

El crumble de limón es una combinación perfecta entre lo crujiente y lo suave, lo dulce y lo ácido. Este delicioso postre, con su base de galleta desmenuzada y su refrescante sabor a limón, es ideal para aquellos que buscan algo diferente y sofisticado. Su textura ligera y refrescante lo convierte en una opción perfecta para el verano, o para cualquier ocasión en la que quieras sorprender a tus invitados con un toque cítrico y exquisito. Además, esta receta es sumamente sencilla, lo que te permitirá disfrutar de un postre casero sin pasar horas en la cocina.

Con ingredientes que probablemente ya tengas en tu despensa, este crumble de limón es una excelente opción si buscas algo rápido, pero delicioso. Es una receta que, sin duda, se convertirá en uno de tus postres favoritos por su equilibrio perfecto entre dulzor y acidez. ¡Atrévete a prepararlo y disfruta del sabor fresco del limón!

Ingredientes

• 150 g de harina
• 100 g de azúcar
• 100 g de mantequilla fría
• Ralladura de 1 limón
• Zumo de 2 limones
• 1 huevo
• 1 cucharadita de polvo de hornear
• 50 g de azúcar glas
• 1 pizca de sal

Modo de preparación

Prepara la masa crumble: En un bol grande, mezcla la harina, el azúcar y la mantequilla fría cortada en cubos pequeños. Usa las yemas de tus dedos para desmenuzar la mezcla hasta que adquiera una textura arenosa. Este es el paso clave para obtener esa cubierta crujiente característica de los crumbles. Añade la ralladura de limón y una pizca de sal para potenciar el sabor.

Precalienta el horno: Mientras preparas el resto de los ingredientes, precalienta el horno a 180°C para asegurarte de que esté en la temperatura adecuada cuando coloques el crumble.

Prepara el relleno de limón: En un bol aparte, mezcla el zumo de los limones, el huevo y el azúcar glas. Bate bien hasta obtener una mezcla suave y sin grumos. Este relleno aportará ese delicioso toque ácido y refrescante que caracteriza a este postre.

Montaje del crumble: En un molde para hornear engrasado, coloca la mitad de la mezcla arenosa en la base, presionando ligeramente para que quede compacta. Luego, vierte el relleno de limón sobre la base y, finalmente, cubre con el resto de la mezcla de crumble, dejando algunas zonas sueltas para que se dore de manera irregular.

Horneado: Coloca el molde en el horno precalentado y hornea durante unos 30-35 minutos, o hasta que la parte superior esté dorada y crujiente. El aroma a limón comenzará a llenar tu cocina, indicándote que el crumble está casi listo.

Deja enfriar y sirve: Una vez horneado, retira el crumble del horno y deja que se enfríe a temperatura ambiente. Puedes servirlo tibio, acompañado de una bola de helado de vainilla, o dejarlo enfriar completamente para disfrutarlo como un postre más ligero.

Consejos y Conclusión

Si quieres darle un toque especial a este crumble, puedes añadir algunas frutas frescas al relleno de limón. Las frambuesas o los arándanos combinan a la perfección con el sabor cítrico del limón, aportando un toque de color y frescura adicional. Otra opción es añadir un toque de jengibre rallado al relleno de limón, lo que realzará aún más los sabores y añadirá una nota de calidez que contrasta de manera deliciosa con la acidez del limón.

El crumble de limón es un postre versátil, refrescante y, sobre todo, muy fácil de preparar. Con su capa superior crujiente y su interior suave y ácido, es ideal para quienes buscan un postre que no sea demasiado empalagoso, pero que deje una impresión duradera. Su combinación de sabores y texturas lo hace perfecto para cualquier época del año, y su simplicidad en la preparación te permitirá disfrutar de un postre gourmet sin complicaciones. Además, es una receta que puedes personalizar añadiendo tus frutas favoritas o jugando con diferentes ingredientes. ¡Anímate a probar este crumble de limón y descubre por qué es tan irresistible!