Descripción

La avena y la manzana son dos ingredientes llenos de fibra y nutrientes, perfectos para un desayuno saludable, especialmente si buscas opciones sin azúcar, harina ni huevos. Esta receta combina la dulzura natural de la manzana con la textura cremosa de la avena, haciendo que sea un plato delicioso y fácil de preparar. Añadir canela, vainilla, leche vegetal, y opcionalmente, semillas de chía o frutos secos, convierte esta receta en una opción versátil y adaptable a tus preferencias.

Ingredientes

• 1 taza de avena en hojuelas.
• 1 manzana grande, de la variedad que prefieras.
• 1 cucharadita de canela en polvo.
• 1 cucharadita de esencia de vainilla.
• 1/2 taza de leche vegetal (almendra, avena, o tu favorita).
• 1 cucharada de semillas de chía o linaza (opcional).
• Un puñado de frutos secos o semillas (nueces, almendras, etc.).
• Miel o jarabe de agave al gusto (opcional).

Modo de preparación

Preparar la avena: En una olla pequeña, mezcla la avena con la leche vegetal. Cocina a fuego lento, removiendo ocasionalmente, hasta que la avena comience a espesar (unos 5-7 minutos).

Rallar la manzana: Mientras la avena se cocina, pela y ralla la manzana. Si prefieres más textura, también puedes cortarla en cubos pequeños.

Añadir la manzana: Incorpora la manzana rallada a la avena junto con la canela y la vainilla. Cocina por otros 2-3 minutos, permitiendo que los sabores se mezclen bien.

Agregar semillas y frutos secos: Si deseas, añade las semillas de chía o linaza y los frutos secos en este punto. Estas adiciones aumentarán el contenido de fibra y proteínas de tu desayuno.

Endulzar (opcional): Si prefieres un toque más dulce, agrega un poco de miel o jarabe de agave al gusto.

Servir: Retira del fuego y sirve en un bol. Puedes decorar con más frutos secos, un poco más de canela o incluso una cucharada de yogur natural si lo deseas.

Consejos y Conclusión

Variedad de frutas: Si bien la manzana es la protagonista aquí, puedes cambiarla por plátano, pera o incluso añadir frutos rojos.
Textura cremosa: Si te gusta una textura más suave, puedes licuar la mezcla de avena y manzana antes de añadir los frutos secos.
Prepara con anticipación: Este desayuno se puede preparar la noche anterior y almacenar en la nevera para ahorrar tiempo en las mañanas.
Opciones veganas: Asegúrate de usar leche vegetal y evita la miel si quieres mantener la receta completamente vegana.
Esta receta de avena con manzana es una opción deliciosa y nutritiva para comenzar el día con energía. Con su preparación sencilla y sus ingredientes saludables, es ideal para quienes buscan una opción sin azúcar, harina ni huevos, pero llena de sabor. Además, es personalizable, permitiendo adaptarla a tus gustos o añadir ingredientes adicionales como semillas o frutos secos. Perfecto para un desayuno rápido o incluso para llevar al trabajo o la escuela.