Una receta práctica e irresistible que combina sabor, sencillez y un toque especial para deleitar a tu familia. Este plato de pasta con chorizo es perfecto para un almuerzo o cena rápida y deliciosa. ¡El aroma de las especias y el queso derretido al final hacen que esta comida sea inolvidable! Pruébala y convierte momentos simples en recuerdos deliciosos.
Prepara la base:
Calienta un chorrito de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio, creando la base perfecta para los sabores.
Dora los ingredientes principales:
Agrega la cebolla picada y el chorizo en rodajas. Cocina hasta que la cebolla esté transparente y el chorizo ligeramente dorado.
Incorpora los líquidos:
Añade la pasta cruda, el tomate picado y la crema de leche. Remueve bien para mezclar los ingredientes.
Añade el toque especial:
Desmenuza el cubo de caldo de pollo en la sartén, asegurándote de que se distribuya uniformemente.
Condimenta:
Agrega la sal, la pimienta negra y el orégano. Mezcla nuevamente y ajusta los condimentos al gusto.
Cocina a la perfección:
Tapa la sartén y cocina la pasta a fuego bajo, removiendo ocasionalmente para que absorba todos los sabores.
Derrite el queso:
Cuando la pasta esté al dente, espolvorea el queso mozzarella rallado encima. Tapa de nuevo y deja que el queso se derrita.
Añade frescura:
Para finalizar, espolvorea perejil fresco picado encima. Este toque aporta frescura y color al plato.
Sirve con amor:
Pasa la preparación a un plato y disfruta cada bocado. ¡Tu familia adorará esta comida hecha con cariño!
Si quieres variar, reemplaza la mozzarella por queso parmesano para un sabor más intenso o agrega trocitos de tocino junto con el chorizo. Acompaña con una ensalada fresca para una comida completa.
Cocinar todos los días no tiene por qué ser aburrido. Con recetas prácticas como esta, puedes transformar las comidas cotidianas en experiencias deliciosas para tu familia. ¡Prueba esta combinación de sabores y crea recuerdos inolvidables llenos de amor y sabor!