Descripción

El pastel frío de Oreo es un postre que combina lo mejor de dos mundos: la cremosidad de una deliciosa mezcla de queso crema con la textura crujiente y el sabor irresistible de las galletas Oreo. Es un postre que no requiere horneado, lo que lo convierte en una opción fácil y rápida de preparar, ideal para cualquier ocasión. La base, hecha con galletas Oreo trituradas y mantequilla, ofrece un contraste perfecto con la suave crema de queso, creando una experiencia de sabor y textura que deleita el paladar. Además, este pastel frío es tan versátil que se puede decorar de múltiples maneras, permitiendo que cada persona le dé su toque personal. A continuación, te explico paso a paso cómo hacer este delicioso pastel frío de Oreo.

Ingredientes

• 24 galletas Oreo
• 1/4 taza de mantequilla derretida
• 250g de queso crema a temperatura ambiente
• 1 taza de azúcar glas
• 2 tazas de crema batida (puedes usar nata para montar)
• 1 cucharada de extracto de vainilla

Modo de preparación

Preparación de la base:

Comienza separando las galletas Oreo. Retira la crema de las galletas y reserva para más tarde.
Tritura las galletas hasta obtener migas finas. Puedes hacerlo en un procesador de alimentos o colocándolas en una bolsa y aplastándolas con un rodillo.
Mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta que estén bien combinadas.
Vierte la mezcla en el fondo de un molde desmontable y presiona firmemente con el dorso de una cuchara para formar una capa uniforme.
Coloca el molde en el refrigerador para que la base se enfríe y endurezca mientras preparas el relleno.
Preparación de la crema:

En un bol grande, bate el queso crema a temperatura ambiente hasta que esté suave y cremoso.
Añade el azúcar glas y la crema de las galletas Oreo que reservaste anteriormente. Sigue batiendo hasta que la mezcla esté completamente homogénea.
Incorpora el extracto de vainilla y mezcla bien.
En otro bol, bate la crema hasta que forme picos suaves. Si estás usando nata para montar, asegúrate de que esté bien fría antes de batirla para obtener una mejor consistencia.
Con movimientos envolventes, mezcla la crema batida con la mezcla de queso crema hasta obtener una crema suave y esponjosa.
Montaje del pastel:

Saca el molde con la base de Oreo del refrigerador.
Vierte la mezcla de crema sobre la base y alisa la superficie con una espátula o el dorso de una cuchara.
Para un toque extra de sabor y textura, puedes triturar unas pocas galletas Oreo adicionales y espolvorearlas por encima de la crema.
Cubre el pastel con plástico film y refrigera durante al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche, para que los sabores se mezclen y el pastel adquiera firmeza.
Decoración y presentación:

Antes de servir, puedes decorar el pastel frío de Oreo con más migas de galleta, crema batida o trozos de galletas Oreo.
Retira el pastel del molde desmontable con cuidado y colócalo en un plato para servir.
Corta en porciones y disfruta de este postre delicioso y refrescante.

Consejos y Conclusión

Dicas Extras:

Variaciones: Puedes añadir una capa adicional de chocolate derretido sobre la base de galleta antes de añadir la crema, lo que dará un toque aún más decadente al pastel.
Alternativas de decoración: Además de las migas de Oreo, puedes decorar el pastel con frutas frescas como fresas o frambuesas para un contraste fresco y colorido.
Conservación: El pastel frío de Oreo se conserva bien en el refrigerador durante 3-4 días. Asegúrate de mantenerlo bien cubierto para que no absorba olores de otros alimentos.
Conclusión:

El pastel frío de Oreo es una opción perfecta para quienes buscan un postre fácil de preparar pero lleno de sabor. Su combinación de crema suave y galletas crujientes es simplemente irresistible, y su versatilidad permite que cada persona lo adapte a su gusto. Ideal para reuniones, celebraciones o simplemente para darse un capricho, este pastel se convertirá en uno de los favoritos en tu repertorio de recetas. ¡Anímate a prepararlo y disfruta de un delicioso momento con cada bocado!