El panqué esponjoso es un clásico de la repostería casera, ideal para acompañar con una taza de café o té en el desayuno o la merienda. Su textura aireada y su sabor suave lo convierten en una opción perfecta para quienes buscan un postre ligero y fácil de hacer.
Esta receta no solo es simple, sino que también se puede personalizar con distintos sabores y toppings, como frutas, frutos secos o chocolate. Con ingredientes básicos y un proceso de preparación sencillo, obtendrás un panqué delicioso, dorado por fuera y extra suave por dentro. ¡Anímate a prepararlo y disfruta de su increíble textura!
1. Preparar los ingredientes
Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde para panqué con mantequilla y harina o usa papel para hornear para evitar que se pegue.
En un bol grande, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla se vuelva espumosa y clara. Esto ayudará a que el panqué tenga una textura más esponjosa.
2. Mezclar los ingredientes líquidos
Añade la leche, el aceite (o mantequilla derretida) y la esencia de vainilla, mezclando suavemente hasta integrar todos los ingredientes.
Si decides darle un toque cítrico, este es el momento de agregar la ralladura de limón o naranja.
3. Incorporar los ingredientes secos
En otro recipiente, tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal. Este paso es clave para que el panqué quede liviano y sin grumos.
Añade poco a poco los ingredientes secos a la mezcla de huevos, integrándolos con movimientos envolventes o batiendo a velocidad baja. Si deseas un panqué de chocolate, incorpora una cucharada de cacao en polvo y mezcla bien.
Si vas a agregar chips de chocolate o frutos secos, pásalos primero por un poco de harina para que no se hundan en la masa y distribúyelos de manera uniforme.
4. Horneado
Vierte la mezcla en el molde previamente engrasado y hornea durante 40-45 minutos a 180°C.
Para comprobar si está listo, introduce un palillo en el centro del panqué; si sale limpio, significa que está bien cocido. De lo contrario, deja unos minutos más en el horno y revisa nuevamente.
5. Dejar enfriar y servir
Saca el panqué del horno y deja que repose en el molde durante 10 minutos antes de desmoldarlo. Luego, colócalo sobre una rejilla para que se enfríe completamente.
Antes de servir, puedes espolvorearlo con azúcar glas, bañarlo con un poco de miel o decorarlo con frutas frescas.
💡 Para un panqué extra esponjoso:
Usa huevos a temperatura ambiente y bátelos bien con el azúcar para incorporar aire.
Tamiza la harina antes de agregarla a la mezcla.
No sobrebatas la masa una vez agregados los ingredientes secos, para evitar que el panqué quede denso.
💡 Opciones de sabor:
Panqué de canela: Añade 1 cucharadita de canela en polvo a la mezcla.
Panqué marmoleado: Separa una parte de la masa y mézclala con cacao en polvo. Luego, combínalas en el molde y revuelve ligeramente con un palillo para un efecto marmoleado.
Panqué con glaseado: Mezcla azúcar glas con jugo de limón o leche y viértelo sobre el panqué cuando esté frío.
💡 Cómo conservarlo:
Para que se mantenga fresco, guárdalo en un recipiente hermético a temperatura ambiente hasta por 3 días.
Si quieres conservarlo por más tiempo, puedes congelarlo en porciones envueltas en papel film y luego en una bolsa hermética.
Este panqué esponjoso es la receta perfecta para cualquier ocasión: es fácil, rápido y delicioso. Puedes disfrutarlo tal cual o personalizarlo con los ingredientes que más te gusten.
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