Esta receta de tortilla de papas y cebolla es una opción deliciosa y reconfortante, inspirada en la tradicional tortilla española. Con pocos ingredientes y una preparación sencilla, es perfecta para comidas rápidas y se puede servir como guarnición, plato principal o incluso en un brunch. La combinación de papas, cebolla y huevos crea una textura cremosa y un sabor irresistible, especialmente con el ligero frito que deja la tortilla ligeramente dorada y crujiente por fuera.
Comience cortando la cebolla en aros finos. La cebolla se freirá junto con las papas, aportando un sabor dulce y ligeramente caramelizado a la tortilla. Los aros finos aseguran que la cebolla se cocine rápidamente y se integre bien en el plato.
A continuación, pele y corte las 4 papas en rodajas finas o en cubos pequeños, según su preferencia. Las rodajas más finas se cocinan de manera uniforme y ayudan a mantener la textura cremosa de la tortilla.
En una sartén grande, caliente una cantidad generosa de aceite y, una vez que esté caliente, añada las papas para freír. El aceite debe cubrir las papas, permitiendo que se cocinen de manera uniforme y queden tiernas por dentro y ligeramente crujientes por fuera.
Después de unos minutos, añada la cebolla a la sartén junto con las papas. Revuelva con cuidado para asegurarse de que todos los ingredientes estén sumergidos en el aceite y se frían de manera uniforme. La cebolla agrega un sabor suave y caramelizado a la tortilla, elevando el plato.
Cuando las papas y la cebolla estén bien doradas y tiernas, escurra el aceite y retire los ingredientes de la sartén. Déjelos reposar sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite, garantizando una textura más ligera para la tortilla.
En un recipiente grande, rompa los 5 huevos y agregue una cucharadita de sal. Bata bien los huevos hasta que la mezcla esté homogénea y ligeramente espumosa. Los huevos forman la base de la tortilla, por lo que es importante que estén bien mezclados para asegurar una textura suave.
Añada las papas y la cebolla fritas a los huevos batidos y mezcle suavemente, asegurándose de que todos los ingredientes estén bien cubiertos. Este paso ayuda a integrar todos los sabores, creando una mezcla equilibrada.
Caliente una sartén antiadherente y añada un chorrito de aceite para evitar que la tortilla se pegue. Este aceite adicional también ayuda a crear una capa externa ligeramente dorada y crujiente.
Vierta la mezcla de huevos, papas y cebolla en la sartén caliente. Tape la sartén para que la tortilla se cocine de manera uniforme y alcance la textura ideal. Cocine a fuego bajo para asegurar que los huevos se cuajen sin quemar la base.
Después de unos minutos, use un plato para ayudar a voltear la tortilla y cocinar el otro lado. Este paso es fundamental para asegurar que ambos lados queden dorados y que la tortilla se cocine por completo. Deje dorar unos minutos más hasta que esté bien firme.
Retire la tortilla de la sartén y colóquela en un plato para servir. Puede servirse caliente o a temperatura ambiente y queda deliciosa acompañada de una ensalada verde o rebanadas de pan.
Consejo Extra
Para un toque especial, intente agregar hierbas frescas, como perejil o cebollino, a la mezcla de huevos antes de freír. Estas hierbas aportan frescura y una capa extra de sabor al plato. Otra opción es espolvorear un poco de queso rallado sobre la tortilla antes de voltearla, creando una costra ligeramente derretida y sabrosa.
Conclusión
La tortilla de papas y cebolla es una receta clásica que combina simplicidad y sabor. Con pocos ingredientes y una preparación práctica, este plato conquista todos los paladares. Ya sea como entrada, guarnición o plato principal, la tortilla es versátil y se adapta a cualquier ocasión. Pruebe esta receta y disfrute cada bocado de esta irresistible combinación de papas, cebolla y huevos. Sírvala con una ensalada fresca o una rebanada de pan y disfrute de una comida reconfortante y llena de sabor.