Prepárate para disfrutar de un plato sencillo pero lleno de sabor. Papas doradas y crujientes combinadas con la cremosidad del queso, el sabor intenso de la salchicha ahumada y un toque especial de salsa barbecue. Esta receta es ideal para un desayuno completo, un brunch o una cena rápida y deliciosa. Con pocos ingredientes y pasos simples, sorprenderás a todos los que la prueben.
Corta las papas: Lava bien las papas y córtalas en trozos medianos o en rodajas finas, según tu preferencia, para una cocción uniforme.
Calienta el aceite: Coloca una sartén antiadherente a fuego medio y añade un chorro generoso de aceite de oliva para preparar la fritura.
Derrite la mantequilla: Agrega la mantequilla a la sartén caliente y remueve hasta que se derrita por completo y se integre con el aceite.
Fríe las papas: Añade las papas a la sartén y remueve ocasionalmente para que queden doradas y crujientes por todos lados.
Prepara los huevos: Mientras las papas se fríen, rompe los huevos en un recipiente y bate ligeramente con un tenedor o batidor hasta que estén homogéneos.
Sazona los huevos: Añade una pizca de sal a la mezcla de huevos y remueve nuevamente para distribuir el condimento.
Combina los huevos con las papas: Vierte los huevos batidos directamente sobre las papas, cubriéndolas de manera uniforme.
Añade la salsa barbecue: Cuando los huevos comiencen a cuajar, rocía la salsa barbecue sobre la mezcla para aportar un sabor intenso.
Ralla el queso: Mientras la salsa se calienta, ralla el queso mozzarella para facilitar su uso.
Incorpora el queso: Espolvorea el queso rallado generosamente sobre las papas y los huevos. Tapa la sartén para que el queso se derrita y forme una capa cremosa.
Añade la salchicha: Distribuye la salchicha rallada sobre la mezcla y, si deseas, agrega un poco más de queso para intensificar el sabor.
Sirve y disfruta: Cuando el queso esté completamente derretido y la salchicha ligeramente dorada, retira del fuego y sirve inmediatamente.
Para un toque gourmet, añade hierbas frescas como perejil o cebollino al final de la preparación. Esto realza el sabor y embellece el plato.
Esta receta transforma ingredientes básicos en un plato delicioso. Ya sea para compartir con amigos o para consentirte, el resultado siempre será un éxito. ¡Buen provecho!