Descripción

El budín de limón es un clásico de la repostería que combina sencillez y frescura en cada bocado. Este postre, con su textura esponjosa y su intenso aroma a limón, es perfecto para acompañar una taza de té, para endulzar la merienda o incluso como una opción ligera para el postre. La combinación del jugo y la ralladura de limón aporta un equilibrio ideal entre dulzura y acidez, haciendo que este budín sea irresistible para cualquier amante de los cítricos. Lo mejor de todo es que es una receta fácil de preparar, ideal tanto para principiantes como para expertos en la cocina.

Ingredientes

• 2 huevos
• 250 gramos de harina leudante
• 100 ml de aceite de girasol
• 100 gramos de azúcar
• Jugo de un limón mediano
• Ralladura de un limón
• 1 cucharadita de polvo de hornear

Modo de preparación

Comienza precalentando el horno a 150°C y engrasando un molde para budín, o bien cubriéndolo con papel manteca para facilitar el desmolde. En un recipiente amplio, mezcla el azúcar con el aceite de girasol, batiendo hasta obtener una consistencia homogénea.

Agrega el jugo de limón y la ralladura, incorporándolos bien hasta que el azúcar comience a disolverse y los aromas cítricos se liberen. Luego, añade los huevos uno a uno, batiendo después de cada adición para asegurar que estén bien integrados en la mezcla.

Tamiza la harina junto con el polvo de hornear e incorpóralos gradualmente a la preparación anterior. Mezcla con movimientos envolventes para evitar grumos y conseguir una textura cremosa y uniforme.

Vierte la mezcla en el molde preparado, asegurándote de distribuirla de manera pareja. Lleva el molde al horno precalentado y hornea durante aproximadamente 30 minutos. El tiempo puede variar dependiendo del horno, así que verifica la cocción introduciendo un palillo en el centro; si sale limpio, el budín está listo.

Retira el budín del horno y déjalo enfriar durante unos 10 minutos antes de desmoldarlo sobre una rejilla. Permite que se enfríe completamente antes de cortarlo y servir.

Consejos y Conclusión

Para darle un toque especial, puedes preparar un glaseado simple mezclando azúcar impalpable con unas gotas de jugo de limón. Este glaseado no solo realza el sabor cítrico, sino que también aporta un acabado brillante y atractivo al budín. Si prefieres experimentar, añade semillas de amapola a la mezcla para un toque crujiente y decorativo.

Este budín también se conserva perfectamente en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante 2 o 3 días, o en la nevera por hasta una semana. Si deseas congelarlo, envuélvelo en film plástico y guárdalo hasta por tres meses; solo asegúrate de descongelarlo completamente antes de servir.
Preparar este budín de limón es una experiencia sencilla y gratificante que llena tu cocina de un aroma fresco y cítrico. Su textura ligera y sabor vibrante lo convierten en un postre versátil que se adapta a cualquier ocasión. Explora otras recetas deliciosas en nuestro sitio y descubre nuevas formas de sorprender a tus seres queridos. Comparte esta receta con tus amigos y familiares, y sigue navegando por más ideas culinarias que inspiren tu creatividad en la cocina. ¡Disfruta de cada bocado!