El bizcocho de arándanos es una verdadera joya de la repostería casera, combinando la acidez refrescante de los arándanos con la suavidad de una masa esponjosa y ligeramente dulce. Es una receta sencilla pero cargada de sabor, ideal para cualquier ocasión. Ya sea para acompañar una taza de café por la mañana, como postre después de una comida o como una deliciosa merienda, este bizcocho siempre es una excelente elección. Su textura tierna y su sabor equilibrado hacen que cada bocado sea una experiencia memorable. Además, es una receta que se adapta fácilmente a los ingredientes que tengas a mano, y siempre es un éxito entre quienes la prueban.
Preparar el molde y el horno:
Precalienta el horno a 180°C (350°F).
Engrasa y enharina un molde para bizcocho o un molde para pan.
Mezclar los ingredientes secos:
En un tazón grande, tamiza la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio y la sal. Reserva.
Mezclar los ingredientes húmedos:
En otro tazón, bate la mantequilla y el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa y suave.
Añade los huevos, uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
Agrega el extracto de vainilla y la ralladura de limón, si la estás usando.
Incorporar el yogur y los ingredientes secos:
Añade la mezcla de ingredientes secos a la mezcla de mantequilla y azúcar, alternando con el yogur. Comienza y termina con los ingredientes secos. Mezcla hasta que estén bien integrados, sin batir en exceso.
Añadir los arándanos:
Incorpora suavemente los arándanos a la masa, teniendo cuidado de no romperlos.
Hornear:
Vierte la masa en el molde preparado y nivela la superficie con una espátula.
Hornea durante 50-60 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro del bizcocho salga limpio.
Enfriar y servir:
Deja enfriar el bizcocho en el molde durante 10-15 minutos antes de desmoldarlo y colocarlo sobre una rejilla para que se enfríe completamente.
Una vez frío, puedes espolvorear un poco de azúcar glas por encima antes de servir, si lo deseas.
Dica Bonus:
Para un toque extra de sabor y una textura crujiente, puedes agregar una capa de streusel por encima antes de hornear. Mezcla ¼ de taza de mantequilla fría en cubos, ¼ de taza de azúcar moreno, ½ taza de harina y una pizca de canela, y espolvorea sobre la masa antes de meterla al horno. ¡El contraste entre la masa suave y el streusel crujiente elevará este bizcocho a otro nivel!
Conclusión:
Este bizcocho de arándanos es más que una receta; es una invitación a disfrutar de la repostería casera en su máxima expresión. Con ingredientes sencillos y un proceso fácil de seguir, puedes crear un postre que no solo deleitará tus sentidos, sino que también encantará a todos los que lo prueben. Acompañado de un té o café, o simplemente disfrutado solo, este bizcocho es perfecto para cualquier momento del día. Atrévete a experimentar con la receta, añadiendo tus toques personales, y conviértelo en un favorito en tu hogar. ¡Buen provecho!