Descripción

No hay nada como el aroma irresistible de pan recién horneado llenando tu hogar. Los panecillos de leche son una opción exquisita para aquellos que desean disfrutar de un pan suave, esponjoso y ligeramente dulce. Perfectos para el desayuno, la merienda o acompañar una comida, estos panecillos se destacan por su textura delicada y su sabor reconfortante. Al ser caseros, no solo disfrutas del proceso de amasado, sino también de la satisfacción de saber exactamente qué ingredientes estás utilizando para alimentar a tu familia. Con esta receta, aprenderás a crear panecillos de leche que, sin duda, se convertirán en una de las favoritas de tu repertorio culinario.

Ingredientes

• 500 gramos de harina de trigo
• 250 ml de leche tibia
• 50 gramos de mantequilla
• 25 gramos de levadura fresca
• 75 gramos de azúcar
• 1 huevo
• 1 cucharadita de sal

Modo de preparación

Preparación de la levadura: Comienza disolviendo la levadura fresca en la leche tibia. Asegúrate de que la leche no esté demasiado caliente, ya que esto puede matar la levadura. Agrega una cucharadita de azúcar para activar la levadura y deja reposar durante unos 10 minutos o hasta que veas burbujas en la superficie.

Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, tamiza la harina de trigo junto con la sal y el azúcar restante. Haz un hueco en el centro de la mezcla de harina.

Amasado inicial: Vierte la mezcla de levadura en el hueco de la harina y comienza a mezclar con una espátula o con las manos. Añade el huevo ligeramente batido y la mantequilla derretida. Continúa mezclando hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.

Amasado: En una superficie ligeramente enharinada, amasa la masa durante unos 10 minutos. El amasado es crucial para desarrollar el gluten, lo que dará a los panecillos esa textura esponjosa tan característica. Si la masa está muy pegajosa, puedes añadir un poco más de harina, pero ten cuidado de no excederte para que los panecillos no queden duros.

Primer levado: Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cúbrelo con un paño húmedo y deja que repose en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.

Formación de los panecillos: Después del primer levado, desgasifica la masa presionándola suavemente. Divide la masa en porciones iguales, formando bolas de tamaño uniforme. Coloca los panecillos en una bandeja de horno previamente engrasada o forrada con papel de horno.

Segundo levado: Cubre los panecillos con un paño y deja que reposen nuevamente durante 30 minutos. Durante este tiempo, los panecillos seguirán creciendo y desarrollando su textura esponjosa.

Horneado: Precalienta el horno a 180°C. Pinta los panecillos con un poco de leche para darles un color dorado brillante y hornea durante 20-25 minutos o hasta que estén dorados en la parte superior. Para comprobar si están listos, golpea suavemente la base de un panecillo; si suena hueco, están perfectamente cocidos.

Enfriado: Una vez horneados, retira los panecillos del horno y colócalos en una rejilla para que se enfríen. Es importante dejarlos enfriar para que mantengan su textura.

Consejos y Conclusión

Dica Bonus:

Para un toque especial, puedes rellenar los panecillos antes de hornearlos. Un poco de mermelada, crema pastelera, o incluso trozos de chocolate pueden convertir estos panecillos en un verdadero placer. Además, si prefieres un sabor más sofisticado, añade una pizca de canela o extracto de vainilla a la masa. Estos pequeños detalles pueden elevar esta receta básica a un nuevo nivel de delicia.
Conclusión:

Los panecillos de leche son una opción versátil y deliciosa para cualquier ocasión. Ya sea que los disfrutes recién salidos del horno con una taza de café, o los reserves para acompañar tus comidas, su suavidad y sabor te conquistarán. Esta receta no solo es fácil de seguir, sino que también te ofrece la oportunidad de experimentar con diferentes sabores y rellenos, haciendo que cada hornada sea única. La próxima vez que busques algo especial para hornear, recuerda que estos panecillos de leche son una opción que nunca decepcionará. ¡Anímate a prepararlos y disfruta del placer de hornear en casa!