Descripción

Hoy vamos a preparar un clásico de la cocina casera that te hará agua la boca: pastel de carne relleno de huevo. Esta receta es perfecta para una comida familiar, ideal para compartir con aquellos que más quieres, o incluso para sorprender a tus invitados en una cena especial. Imagínate la escena: un delicioso pastel de carne que, al momento de cortarlo, revela su sorpresa interior: un relleno cremoso y perfectamente cocido, con huevos duros que aportan un toque de sabor inigualable. Es un plato que combina lo reconfortante de la carne con la suavidad de los huevos, convirtiéndolo en un manjar que seguro recordarás.

Además, lo mejor de esta receta es que utiliza ingredientes que probablemente ya tienes en tu cocina, lo que la hace aún más accesible. Puedes acompañarlo con una ensalada fresca o unas crujientes papas al horno para completar una comida equilibrada. Vamos a sumergirnos en esta deliciosa receta y a descubrir el arte de preparar este sabroso pastel.

Ingredientes

• 500 g de carne picada (puede ser de res, cerdo o una mezcla)
• 3 huevos duros
• 1 cebolla mediana picada finamente
• 1 diente de ajo picado
• 1 zanahoria rallada
• 1/2 taza de pan rallado
• 1/4 taza de leche
• 1 huevo crudo
• Sal y pimienta al gusto
• 1 cucharadita de orégano
• 1 cucharadita de pimentón dulce
• Aceite de oliva para saltear

Modo de preparación

Primero, comenzamos por preparar la mezcla de carne. En un bol grande, coloca la carne picada y añade la cebolla, el ajo y la zanahoria. Es importante mezclar bien todos estos ingredientes para que se integren adecuadamente. La clave aquí es asegurarse de que cada bocado del pastel de carne lleve el sabor de cada uno de los ingredientes. Una vez que todo esté bien mezclado, añade el huevo crudo, el pan rallado, la leche, el orégano, el pimentón, sal y pimienta al gusto. Mezcla nuevamente hasta obtener una masa homogénea. El pan rallado y la leche ayudarán a que la carne quede más suave y jugosa, lo que mejorará la textura de nuestro pastel.

Ahora, tenemos que preparar los huevos duros. Cocina los tres huevos en agua hirviendo durante unos diez minutos. Esto asegurará que estén completamente cocidos. Una vez pasados los diez minutos, retira los huevos del agua caliente y enjuágalos con agua fría. Eso facilitará el pelado posterior. Deja los huevos a un lado mientras avanzamos con el resto de la preparación.

Es momento de armar el pastel de carne. Precalienta tu horno a 180°C. Mientras el horno se calienta, toma una fuente para horno y extiende la mitad de la mezcla de carne en la base, formando una capa uniforme. Esta primera base de carne proporcionará la estructura para nuestro delicioso relleno. Alinea los huevos duros en el centro de la carne, asegurándote de dejar suficiente espacio entre ellos. Luego, cubre los huevos con el resto de la mezcla de carne, asegurándote de que estén completamente cubiertos. Es fundamental que no queden partes expuestas, ya que esto podría hacer que la superficie se seque durante la cocción.

Antes de llevar nuestro pastel al horno, rocía un poco de aceite de oliva sobre la parte superior del pastel de carne. Esto ayudará a que quede dorado y crujiente por fuera, creando una textura atractiva que complementa el relleno suave del interior. Ahora, lleva el pastel al horno y cocina durante cuarenta a cuarenta y cinco minutos. Es importante que la carne esté completamente cocida y que la parte superior del pastel adquiera un hermoso color dorado.

Una vez que el pastel esté listo, sácalo del horno y déjalo reposar durante unos minutos antes de cortarlo. Este tiempo de reposo es esencial para que los jugos se redistribuyan y el pastel se mantenga jugoso al momento de servir. Cuando lo cortes, verás cómo la carne se deshace con facilidad y se revela el hermoso interior con los huevos perfectos. Sirve en porciones adecuadas y acompaña con tu guarnición favorita. La combinación del pastel de carne jugoso con el huevo en su interior crea un plato impresionante, no solo en sabor, sino también visualmente.

Consejos y Conclusión

Si deseas dar un toque extra a tu pastel, puedes incorporar un poco de queso rallado sobre la carne antes de hornear para que se derrita y forme una capa crocante y deliciosamente cremosa. Este pequeño detalle puede hacer una gran diferencia en el sabor final, convirtiendo tu pastel de carne en una experiencia gourmet.
El pastel de carne relleno de huevo es una receta sencilla pero con un impacto asombroso, ideal para cualquier ocasión. Anímate a prepararlo y disfruta no solo del proceso, sino también de compartirlo con familiares y amigos. Esta clásica delicia no solo te dejará satisfecho, sino que seguramente se convertirá en una de tus recetas favoritas para repetirse. El placer de una comida casera está al alcance de tus manos, y esta receta es una bonita forma de disfrutarlo. ¡Buen provecho!